Nuestro origen
Santo Perro nació en casa
Con nuestros perros, Harry y Tomás, entendimos que dar cualquier cosa no era opción. Queríamos premiarlos con algo que de verdad disfrutaran. Natural, sabroso, seguro. Así empezamos a crear, probar y ajustar… hasta que encontramos algo que tenía sentido para ellos y para nosotros.
No estábamos solos...
Muchos tutores también buscaban opciones más honestas: sin rellenos, sin químicos, sin adornos. Y descubrimos que Santo Perro no era solo una marca. Era una forma de cuidar. Con intención. Con instinto. Con verdad.
Esto es lo que hacemos
Snacks 100% naturales, sin fórmulas mágicas. Proteínas reales, texturas que respetan su naturaleza y sabores que despiertan su instinto. Cada producto está pensado como si fuera para nuestros propios perros. Porque lo es.
Si tú también buscas algo que les haga bien de verdad… esta manada es tuya.